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¿Puertas automáticas en la calle para frenar los atropellos? Sí, y no es una broma

¿Puertas automáticas en la calle para frenar los atropellos? Sí, y no es una broma

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China tiene un grave problema en sus calles. Las muchas veces superpobladas ciudades del país asiático suelen convertirse en todo un caos circulatorio, algo que se complica cuando millones de viandantes deben desplazarse a pie por ciertas zonas de las ciudades en las que coches y motociclistas comparte jungla. Hasta tal punto se ha convertido en una importante problemática esta convivencia, que se estima que un porcentaje superior al 20% de los fallecimientos en el lustro entre 2009 y 2013 se produjeron por atropellos. Ciudades como Shenzhen o Shanghái incluso han ideado sistemas para ridiculizar a aquellos ciudadanos que no respeten las señales luminosas de los semáforos a la hora de cruzar como método de enseñanza de seguridad vial ‘a la fuerza’. Otras localizaciones, como Wuhan han optado por soluciones más imaginativas y tecnológicas, especialmente orientadas a grandes intersecciones como la que conecta las carreteras de Luoyu y la de Zhongnan -lo que en Tokio podríamos comparar con el famoso cruce de Shibuya- lugar por el que transitan cientos de miles de personas diariamente. En la hora punta, entre las ocho y las nueve de la mañana es prácticamente imposible poner algo de control en ese absoluto caos. Gigantes tecnológicos como Siemens han buscado durante años una solución para tratar de coordinar este gran puzle. Ahora, años después, la ciudad más poblada de la zona central de China (más de 8 millones de habitantes) puede haber dado con la tecla. Concretamente han situado las habituales puertas automáticas que nos encontramos a las entradas de las estaciones de metro como método de prueba. Concretamente han sido seis y estas se encuentran en uno de los principales puntos neurálgicos de la ciudad de Wuhan. La apertura de dichas puertas se encuentra coordinada con las luces de los semáforos, por lo que permite el paso dependiendo de si los peatones pueden cruzar o no por el paso de cebra. Al igual que en otras ciudades, también se ha decidido ‘castigar’ a los viandantes que deciden saltarse las normas, en este caso las puertas automáticas, ya que las cámaras colocadas en dicho cruce capturarán sus caras y saldrán reflejadas en una gran pantalla ya instalada en el lugar.  ¿Será el siguiente paso para aquellas ciudades en las que no funcionan tampoco los semáforos en el pavimento?

 

Vía | CGTN

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